Dicho análisis, titulado “Estudio del impacto del Covid-19 sobre el ecosistema del deporte español”, señala que, eliminando los ingresos directos derivados del fútbol profesional, dicho ecosistema contaba con un presupuesto de ingresos para este 2020 de 12.000 millones de euros.

Sin embargo, tras el Covid19 y el posterior confinamiento, se calcula que la cifra de negocio del ecosistema del deporte español pasará a ser este 2020 de 7.400 millones de euros, es decir, un 38,5% menos de lo previsto antes de la pandemia.

Tras consultarse a 631 entidades que representan 4,3 millones de personas, es decir, el 45,2% de la población española con práctica deportiva estructurada, el 27% ha declarado que el impacto del Covid-19 sobre el futuro del ecosistema del deporte español será ”muy negativo”, mientras que el 59,6% ha manifestado que será “negativo”.

Ante ello, las tres acciones que los consultados más han citado como líneas de acción para mitigar los posibles efectos de la pandemia, son ajustes en la previsión de ingresos (señalado por el 64,7% de la muestra), la adaptación de calwendarios y servicios ofertados (62,3%), y la exploración de nuevas vías de ingresos (56%).

En cuanto a las oportunidades que el nuevo escenario plantea, las más apuntadas han sido: poner en marcha nuevos programas de actividades (59,6%), redefinir la visión y planificación estratégica (58,5%), y generar nuevos formatos y modalidades de servicios (56%).

Los consultados han destacado un total de siete ‘pilares fundamentales para informar y reorientar la reconstrucción del ecosistema del deporte español. El más referido (con un 72,3% de citas) ha sido el reconocimiento del deporte como bien de interés general. Tras éste se han posicionado, el incremento de la presencia del deporte, con sus valores y beneficios (69,3% de referencias), y la aportación de estímulos económicos y ayudas en la financiación.

Otros aspectos apuntados han sido la creación de un plan estratégico nacional a cuatro años (33,1% de citas) y el desarrollo de un nuevo marco legislativo (18,3%).

En 2019, según especifica el estudio, había un total de 9,5 millones de personas con práctica deportiva estructurada en España.

Tras el Covid se calcula que esa cifra se reducirá a 8,1 millones de personas, es decir, un 14% menos.

El incremento en los gastos asociados a la inactividad física supondrá incrementar en un 28,17% esos gastos, al pasar de los 1.803 millones de euros que se habían calculado para este 2020, a los 2.311 millones de euros, tras el Covid19. Se ha calculado que el gasto atribuible a la inactividad física derivada del Covid19 ascenderá a 508 millones de euros.

Las federaciones deportivas autonómicas son las que, proporcionalmente, más personas con práctica deportiva estructurada perderan. En concreto, sufrirán una regresión del 155%, al pasar de los 801.435 federados en 2019, a los 314.273 este 2020.

Por su parte, las federaciones estatales sufrirán una involución del 42,2%, al pasar del 1,96 millones de federados en 2019, a los 1,38 millones.

Las asociaciones deportivas sufrirán una pérdida del 39,5% de un año al otro, mientras que los clubes deportivos, la registrarán del 29,7%.

Si las federaciones autonómicas serán las que mayor caída de practicantes de deporte estructurado sufrirán, también serán, proporcionalmente, las que más acusarán económicamente esa involución. Su caída de ingresos se ha calculado en un 77%, tras pasar a los 37,73 millones de euros que se habían presupuestado, a una pérdidas de 8,86 millones de euros.

Sin embargo, serán las empresas vinculadas al deporte las que en términos absolutos mayor pérdida experimentarán. De los 420 millones de euros presupuestados para este 2020, el importe de las pérdidas calculado sitúa a éstas en 181 millones, lo cual supondrá una caída del 57%.

Aquellos ámbitos en los que se registrarán mayores diferencias entre los ingresos presupuestados y las pérdidas ahora previstas, serían los campus y stages de promoción o captación de talento (-75,8%); los tickets o entradas a eventos o competiciones (65,9%), los cánones por competiciones (-57,4%), los derecho de arbitraje (-56,8%), los cursos y otras actividades de formación (56,4%).

También los deportistas verán afectados sus ingresos a causa del Covid19. Concretamnete, su caída de ingresos sufrirá un retroceso del 31%, al pasar de los 19,5 millones previstos antes del Covid19, a los 13,5 millones de euros en que se ha estimado que quedarán a causa de la pandemia.

Tras seguir una curva alcista en la cifra de empleos generados por el deporte desde 2001, el año 2020, truncará esa senda alcista prácticamente ininterrumpida (sólo lo hizo en 2015). De este modo, las previsiones del estudio cifran en una caída del 31% la pérdida de puestos de trabajo que la pandemia provocará.

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Fuente: CMD Sport